sábado, diciembre 26, 2009

miércoles, diciembre 23, 2009

lunes, diciembre 07, 2009

IMAGINARIO





"... el grado de identificación del texto calderoniano con las escenografías de Baccio del Bianco, en una perfecta simbiosis de verso, imagen y sonido (...). La labor de conjunto fue tal que parece difícil imaginar a cada artista trabajando aislado de los demás. Obras como esta hacen pensar que el teatro cortesano tuvo mucho de colaboración desde el momento inicial de la creación de obras, y no sólo en la fase de su desarrollo y puesta en escena. Investigar esta relación entre artistas al servicio de un espectáculo total supone un reto importante que merece aunar esfuerzos"

Mª Luisa Lobato
Universidad de Burgos. "Calderón escenográfico: apuntes a un sistema dramático".
Giornate Calderoniane 2000

CANTADAS LAS 20


Ahora a cantar las cuarenta. Y pegarnos el Tute...

Como veréis la pinta de nuestro blog ha cambiado. Ahora que hemos pasado la pantalla de las lecturas, entramos en la pura imaginación, por eso todo lo que aparezca de aquí en adelante, será como en nuestra pantalla mental chejoviana.

Os invito a todos a escribir cosillas, para seguir llenando este proyecto hermoso. Y os mando un abrazo enorme: que sobreviváis a la Navidad de 2009, porque os quiero listos para el 2010, ya sabéis, esto es imparable ya...

Nuestro dossier ha quedado precioso, las lecturas han dado mucho de qué hablar e imaginar, y lo próximo serán los ensayos, etc.

Feliz Navidad a todos.

maikel

martes, diciembre 01, 2009

entre Caribdis y Escila.

a los del Golfo...

Nos quedan un par de sesiones de trabajo sobre el texto. Y serán las veinte.
Sólamente veinte veces nos habremos juntado alrededor del Golfo. Vamos balbuciendo y ya creando.
Una de las mejores sensaciones sobre vosotros ha sido ver cómo os fajais con lo del verso.

Cuando se toca la tecla justa, esa que tiene en su interior la acción y sonido que corresponde exáctamente a lo que hago, en el caso del verso, su interpretacion es aún más placentera, pues ella provoca en ese instante una avalancha creativa en el actor. De esa avalancha el actor elegirá una para el trabajo definitivo, dejando atrás mil posibilidades. Pero es más placentera, pues a la hora de elegir la candidata, te habrás pasado un buen rato probando las otras, envuelto en bellos sonidos e imágenes imposibles.Todo en una carrera entre límites antiguos, sabiendo que al final de la carrera, no nos espera la muerte. Menos mal.

Os quiero.

jueves, noviembre 12, 2009

GERMANÍA DE TEATRO

"germanía. (Del lat. germanus, hermano) f. Jerga o manera de hablar de ladrones y rufianes, usada por ellos solos y compuesta de voces del idioma español con significación distinta a la verdadera, y de otros muchos vocablos de origénes muy diversos./ 2. amancebamiento./ 3. En el antiguo reino de Valencia, hermandad o gremio./ 4. Germ. Clase de rufianes./ 5. fam.. Albac., And. y Cuen. Tropel de muchachos."

Diccionario de la Real Academia de la Lengua.

la verdad

Al término "hazlo de verdad" no le tengo ningún aprecio. Cuando un
director (no un verdadero maestro) dice o pide algo de esto, siempre
siempre me lo imagino un domingo con su mujer en su bonito jardín,
pintando láminas de bodegones de esos de los que se ve hasta la gota de
barniz, la silla, la mesa, el pañuelo con sus plisados.
Casi nadie te pide cosas que tengan que ver con tu imaginación o la
creatividad. Creo que es un defecto del cine. Un actor, esté afortunado
o no en los resultados que ofrece siempre lo hace de verdad. Y ahí
empiezan a confundirnos. Un actor como cualquier artista realiza un
acto de creación único, pues el artista usa su potente imaginario para
realizar su trabajo, y a través de su cuerpo reproduce lo inventado por
él. ¿Hay un acto más verdadero que este? Yo no quiero preocuparme de
"esa verdad verdaderosa", "ese apaño fácil a la hora de pedirle al
actor". Me gustaría más que se abrieran mundos en la cabeza del
director, que sintiera ráfagas de calor, olor, color,a través de las
palabras de mi director que supuestamente ha experimentado la gracia de
expresar un texto teatral.
Creo que de lo único que deberíamos preocuparnos es de enriquecer y
desarrollar nuestra fuerza creadora, y procurar tener nuestro cuerpo
disponible(entrenado)y capaz de asumir lo que queremos expresar. De ahí
surge el único compromiso con nuestra profesión: tener el instrumento
lo más afinado posible y utilizarlo para sostener nuestra fuerza
creadora. Poco a poco vamos asumiendo, que el imaginario de un actor,
no está en la cabeza, ni son sólo las bonitas imágenes que aparecen en
nuestra pantalla mental (para el que la tenga o la use...) sino en todo
el cuerpo. Todo el cuerpo imagina y así entra en la verdad de lo que
pasa.
Un actor es el único ser que deja de ser él por un momento y se
transforma en Beltrán, una noche, un susurro, Ofelia, la boca de un
coro, el baile de la Jácara, la mirada de un numantino. Eso siempre va
a ser verdad. Pues así lo acreditan millones y millones de espectadores
que vuelven una y otra vez a los teatros a preguntarnos que significa
"La vida es sueño", "Pic-Nic", "Las Galas del Difunto", "El Golfo de
las Sirenas", "El Alcalde de Zalamea"...
Así que no nos queda más remedio que hacerlo de verdad ¿no?


maikel

LA ISLA DE LOS MUERTOS


El arte de recitar

el Mundo 07-06 2000



¿Cómo hay que interpretar el verso en nuestros días? A falta de un método que sirva de referencia a nuestros actores, aquí cada uno hace lo que puede, como muestran los diferentes dramas poéticos producidos esta temporada. Quizás siempre fue así, un díficil arte transmitido por tradición oral que, según algunos, ya exige se codificado.


Cuenta Adolfo Marsillach en sus memorias que cuando se presentó en Buenos Aires con el primer montaje de la Compañía Nacional de Teatro Clásico (CNTC), El médico de su honra, Miguel de Molina le dió la clave de lo que le iba a ocurrir en un futuro al frente de la compañía: “Mira Marsillach, el teatro clásico no se hace así”, le espetó el cantaor. “¿Y cómo se hace?”, preguntó el director. “Gritando, el teatro clásico se hace gritando”, respondió el artista. Marsillach continúa en su libro que “lo que Miguel de Molina quiso aclararme fue que los versos tienen que declamarse -no en balde existieron en nuestro país los encorsetados Conservatorios de Música y Declamación-, insistiendo en el énfasis y en la musicalidad de su ritmo para provocar el aplauso de los espectadores.”

Precisamente esa declamación romántica y decimonónica era lo que Marsillach, para ese estilo propio de decir el verso que buscaba para la nueva compañía, quería evitar. En 1989, la CNTC puso en marcha una Escuela de Teatro Clásico e invitó a actores del género a impartir unas clases magistrales: María Jesús Valdés, Amparo Rivelles, Jesús Puente, Fernando Fernán Gómez. Pero, en 1992 el propio Marsillach se cargó la escuela y, según dice en sus memorias, “pienso que me equivoqué”. Desde entonces ni la CNTC ha encontrado un estilo propio ni parece que esas sean sus intenciones actuales.

La tradición oral

Al margen de la compañía, el arte de actuar en verso sigue siendo hoy un asunto que parece depender más de la intuición y las cualidades innatas de cada actor o de una compañía que de una escuela . Quizá siempre fue así: una arte transmitido por tradición oral. Aunque hay que señalar el intento de la Real Escuela Superior de Arte Dramático de Madrid (RESAD) de sistematizar estos estudios a través del Master de Teatro Clásico que imparte. O el magisterio que han ejercido algunos profesores y actores como Josefina García Aráez, Alicia Hermida o compañías como la de Zampanó Teatro.

Así las cosas, varias producciones de esta temporada confirman las diferentes actitudes que reinan a la hora de decir el verso. Por un lado, La dama duende, la coproducción de la CNTC con Pentación que ha dirigido Alonso de Santos, reúne un elenco desajustado a la hora de enfrentarse a los versos de Calderón. En No son todos ruiseñores, el Lope de Vega de la compañía Noviembre Teatro dirigido por Eduardo Vasco, hay una búsqueda por decir el verso de forma inteligible y natural pero sin entonación. La vida es sueño de Calixto Bieito no muestra precisamente una preocupación por la formalidad del verso, sino por las acciones físicas. Baraja del rey don Pedro, de Agustín García Calvo y dirigida por José Luis Gómez, reúne unos intérpretes bien orquestados, que busca un tono entre coloquial y elevado. Y Cyrano de Bergerac, dirigido por Mara Recatero y Perez Puig, el poema dramático más largo de todos los mencionados, que cuenta con el experimentado Manuel Galiana.

Ernesto Caballero, que ensaya durante estos días con actores del Master de la RESAD la comedia mitológica de Calderón El mostruo de los jardines, no cree que exista ni que haya existido nunca eso que se entiende como un estilo. En su opinión, hay actores que le han emocionado con sus versos, lo que le lleva a pensar “que tal vez existan múltiples formas y todas válidas y valiosas de actuar el verso, una por actor, si son capaces de transmitir la oportuna emoción artística”. Pero añade que otra cosa es la tradición: “La tradición en el Arte goza de muy mala fama y el teatro no podía ser menos. Esto ha supuesto que hayamos renegado de su carácter artesanal para zambullirnos con regocijo en las procelosas aguas de un océano de escuelas y recetas de última hora que ha preferido explorar en el actor los más accesorios e insignificantes aspectos de su noble disciplina para desentenderse, cuando no para condenar abiertamente a la Cenicienta de toda esta historia: la palabra. Y de la palabra poética, ya para qué hablar”.

Vicente Fuentes, asesor de verso del teatro de La Abadía y profesor de la RESAD, también defiende un teatro basado en la palabra. él es partidario de crear, al igual que hicieron los ingleses, un método o diseño que sirva de referente a los actores que hoy deben interpretar en verso: “En 1949 los ingleses idearon un diseño para decir a Shakespeare, adoptando el modelo de la BBC. Ese modelo es el que ha mantenido y prevalece en la Royal Shakespeare Company y que diferencia su teatro del que puedan interpretar los americanos por ejemplo”.

Referente para los actores

Fuentes encuentra ventajas en tener un modelo que sirva de referente a los actores: “Los únicos datos que tenemos sobre la interpretación en verso en nuestro país es la tradición neorromántica que se ha prolongado hasta los años 50, pero no nos sirve porque está basada en el énfasis y la autoexcitación. Era un modelo que no da valor a la palabra, sino que la encadena y la atenaza”. Por eso, ese estilo o forma que habría que inventar, según él, debe ir por un camino opuesto, “debe creer en la palabra como trampolín para el actor. La palabra es el medio a través del cual articulamos nuestro pensamiento y ésta debe brotar como energía del pensamiento, no conectada con el volumen o el enfásis como antaño”. Su interés se centra en que una actuación en verso, ante todo, tiene que comunicar y, luego, mostrar un equilibrio entre coloquial y elevado.

Frente a los que defienden la naturalidad se sitúa Fernando Urdiales, director de la compañía de teatro clásico Corsario, y que considera el verso como un artificio que busca un lenguaje no naturalista, tal y como le enseñó su profesora Josefina García Aráez. “Nuestros clásicos escribieron en verso para encandilar a un público que hablaba un lenguaje vulgar y, por tanto, es un error pretender decirlo de forma natural”. Urdiales cree que “el público entiende mejor las obras en verso si se respeta éste porque están construidas con una técnica rítmica y musical para la comprensión de los contenidos. No soy partidario de la declamación antigua, retórica e impostada, sino que el actor debe hacer suyos los versos y proyectarlos en la acción”. Y concluye, “para mí las obras que Pilar Miró dirigió para la CNTC y su película El perro del hortelano, en la que estuvo asesorada por Alicia Hermida, es un ejemplo modélico”.



Liz PERALES








INFAME Y MAL HECHO


En primer lugar, no veo mucho teatro del que se hace, aunque por desgracia me lo imagino. En segundo lugar, más de una vez ha tratado de mostrar, ya desde los primeros festivales de Almagro, cómo nuestro teatro del Siglo de Oro es sencillamente infame y mal hecho (así que su producción actual no puede servir ni para deleite ni para descubrimiento, sino para hacer cultura), como teatro hecho para entretener a lo que Lope mismo llama el vulgo necio. Entre las cosas desgraciadas de ese teatro está el que tuvo que escribirse en versos sumamente impropios para la función dramática, principalmente de octosílabos y peor todavía cuando venía cargado de rimas consonantes. Con esa desgracia tienen que habérselas los pobres actores a los que se les quiere hacer “decir verso”, de tal manera que si, como las más veces, tratan de disimularlo y soltarlo como prosa, malo; y si tratan de pronunciar las redondillas, décimas y demás artillería consonántica, pues peor aún. Eso no tiene que ver con la cuestión del verso dramático en general: los versos del teatro antiguo en sus partes no cantadas, los de Shakespeare o los dramas alemanes son en general formas de ritmo adecuadas a la acción dramática (drâma quiere decir acción), y así por mi parte he tratado de hacerlos y hacerlos sonar en las pocas ocasiones en que esos dramas míos subían a las tablas; y así también con las varias hornadas de actores de La Abadía he tratado una y otra vez de que el ritmo de esos versos dramáticos suene en el aire (declamado unas veces, otras cantado, otras en la producción intermedia que llamo melopeya) y que al sonar arrastren consigo el resto de las acciones dramáticas, gestos, pasos, entradas y salidas; porque el ritmo (que no tiene que ver nada con la versificación literaria por ejemplo de nuestro Siglo de Oro) sí que tiene que jugar en el teatro, como juego con el tiempo que suelo llamarlo, juego del tiempo de la representación contra el tiempo de lo representado. Por desgracia este intento va contra la corriente de los tiempos, que trata de reducir ese juego del teatro a mera literatura sobre la escena; por eso cuesta conseguir que aunque sea en parte los actores puedan lanzarse a esa visión declamatoria: generalmente domina una especie de vergüenza de declamar (no digamos canturrear o hacer melopeya) y la tendencia a la dicción natural y expresiva, o sea como en el cine. Pero habría que recordar, aunque sea en contra de los tiempos, que el teatro es arte, por tanto, artificio y no naturaleza ni realidad y que ese es el sentido del juego con el tiempo de que he hablado, que es al mismo tiempo un procedimiento de descubrimiento de la falsedad de la realidad. Eso es lo que deseaba que pudiera ser el teatro.


Agustín García-Calvo

¡ALTO!


(esta imagen es gentileza de Elenna Olivieri)




Martes, 10 de octubre de 2000

MANUEL HIDALGO | ZOOM, el Mundo

Decir el verso


“Se han estrenado dos calderones, y los críticos, como siempre, elucubran sobre cómo han de decir el verso los actores, los cuales, a su vez, bajo la batuta del director, habrán sufrido lo suyo para encontrar el modo, la dicción, el fraseado, el silabeo, el ritmo y todo lo demás.

Este asunto del verso es tema fijo, un par de líneas o tres, en las consideraciones de la crítica ante una pieza de teatro clásico. La crítica nunca se queda satisfecha: o todos los actores lo dicen mal, o unos lo dicen mal y otros lo dicen bien, pero nunca el dichoso verso hace felices a los críticos.

Por mi parte, como espectador corriente y esporádico del teatro versificado, debo decir que casi nunca he entendido nada.

Este es el momento en que aún no sé cómo quieren los críticos que se diga el malhadado verso, aunque ya me he dado cuenta de que siempre quieren que se diga como nunca se dice, lo cual no es decir mucho.

Pero, sin duda, algo de razón deben de tener los críticos, aunque yo nunca entienda lo que pretenden, porque lo que, desde luego, tampoco entiendo, a veces durante minutos y minutos, es el verso mismo, o sea, lo que los actores dicen.


¿No será que el verso mismo es un lenguaje totalmente trasnochado e inasequible para el oído y las entendederas actuales?, ¿no será que el teatro clásico mismo se ha quedado anticuado y no sirve para explicar nada al hombre de hoy?

Esto es una herejía, claro, pero tal vez haya que admitir que la relación entre el tiempo dedicado a una representación, las miles de palabras empleadas en poner en pie el argumento y las ideas que se tratan de comunicar y lo que el espectador saca en limpio no guardan proporción directa.

Esto parecen entenderlo, secretamente, los directores de escena, de modo que van a lo único posible: la creación de un espectáculo visual y sonoro, de una sugerencia plástica que complazca, y punto.

Muchas veces no se sigue bien la trama, no se comprenden los conflictos entre los personajes y ocasiones no faltan en las que no es fácil seguir ni siquiera el asunto central de la pieza. Otra herejía: ¿no sería bueno, como en la ópera, proporcionar al espectador un detallado resumen argumental para leer previamente?

La gente aplaude los fragmentos que aprendió en el colegio. ¿No queda eso un poco patético? Esa reacción responde al gozo de reconocer algo entre una maraña indiscernible. ¿No es una superstición pretender que todo lo que fue grande en el pasado tiene que estar vigente hoy?”

BLOG DE ERNESTO ARIAS

BLOG DE ERNESTO ARIAS

domingo, noviembre 08, 2009

HOLA, AO DEL GOLFO DE LAS SIRENAS...!


" Miércoles 17 de este se hizo en la Zarzuela la comedia grande que el Liche tenía dispuesta para el festejo de los Reyes. Costó 16.000 ducados, que pagó de su orden el conde de Pezuela. Fue día infausto. Lovió a cántaros, que parece se habían desgajado los cielos, como lo ha hecho en Madrid diez días arreo. Cayó el cochero mayor en una balsa, y estuvo a pique de ahogarse, por cogerle el caballo debajo. Púsose Liche en uno suyo, y fue para mayor festejo, haciendo su oficio y supliendo sus faltas. "

Barrionuevo


"No es comedia, sino solo
una fábula pequeña
en que, a imitación de Italia,
se canta y se representa."

Calderón de la Barca






viernes, noviembre 06, 2009

martes, noviembre 03, 2009

¿A quién no le gusta Imperio Romano?




Ayer lunes, se juntaros varias cosas.
Me llegó esta radiografía del corazón, un corazón lleno de fantasía que hay que reanimar. Es como esas mosquitas de la prehistoria que se quedan dendro de una pompa de ámbar para la eternidad . Entonces hay que sacar un poquito de ADN de ese corazón y clonarlo ¿no?

Hubo reunión, tormenta de ideas con Elena y Tomás (nuestro escenoiluminador) y de maravilla.
De momento nubes, telas y reflejos, y de lejos, los espejos. en dos semanas nos volvemos a juntar.(en breve adjuntaremos fotografía de Tomás, para que todos lo conozcan.)


La botella con mensaje que mandamos a María Isabel Rodríguez de la Facultad de Historia De la Complu, se ha recogido, e incluso Elena ha contactado personalmente con ella, pasando un buen momento con ella. Ha mostrado su interés y apoyo para lo que necesitemos... Ella es la autora del texto que os mandé sobre La música de las sirenas.

Bueno y aquí os dejo unas imágenes que me ha mandado la segnorina Olivieri, que son una delicia.


sábado, octubre 31, 2009

El moral y el almendro



"La referencia al moral y al almendro, árbol este último con el que se identifica el
gracioso, apunta hacia los dos objetivos de la fiesta, el moral y el cómico, el permanente y
el fugaz, encarnados en dos imágenes de tradición emblemática, la del Moral, o morera,
símbolo de la prudencia, porque florece tardíamente, sin exponerse por ello a que las
heladas puedan malograr su fruto, y la del Almendro, símbolo de la alegría, porque su
floración es precoz y anuncia la primavera, pero también de la imprudencia y de la falta de reflexión, de la "locura" que le hace exponerse a que las heladas echen a perder sus frutos,
como expone Sebastián de Covarrubias Horozco en uno de sus Emblemas morales:

El moral como bobo es perezoso,
opuesto al antuviado almendro, y echa
quando ha pasado el tiempo riguroso,
y su fruto se goza y aprovecha.
El ingenio precoz y fervoroso,
tras grande muestra, danos ruin cosecha,
el tardo, y manso, vase poco a poco,
Éste es moral, y el otro almendro loco.

Calderón ha construido su fiesta con la madera del "moral" y del "almendro loco",
pero con el puntero de la emblemática señala una vez más hacia el sentido oculto, hacia la
interpretación ética, hacia el fruto permanente, que subyace en su particular modo de
entender el teatro cortesano."

Teresa Ferrer Valls, "El golfo de las sirenas de Calderón de la Barca: égloga y mojiganga. Giornate Calderoniane, Palermo diciembre 2000.

viernes, octubre 30, 2009



A los del esquife


¿Qué ha pasado hoy? Tan diferente de ayer, y ya para siempre irrepetible. ¿Qué pasó? ¿Qué ha pasado hoy, que es la una de la madrugada, y aún estoy saciado de nuestra sesión de trabajo?

Me parece que fue algo así como que la mesa se llenó de gente, pero mucha gente, ¿no? Y la mesa se llenó de luz delante de nuestras caras, y por detrás de nosotros se estamparon en la pared todas nuestras constelaciones. Ya nos están visitando los fantasmas...

Os quiero tripulantes

maikel

miércoles, octubre 28, 2009



Caribdis con su velo.


Escila transformándose en mujer.


ANTEO: En la playa
varados barcos hay

martes, octubre 27, 2009

Modelo de sirena de enero

BORIS TOMACHEVSKI (1928)

"El verso se contrapone claramente a la prosa, porque en esta última el ritmo es el resultado de la estructura semántica y formal del discurso, mientras que en el verso el ritmo es el aspecto que determina la estructura, y, en el ámbito del ritmo, vuelven a encontrarse significado y forma. Si después el ritmo natural del discurso coincide con los límites de la división en versos, no se trata más que de una motivación del ritmo.
Pero, en general, la división del discurso en versos se produce independientemente de la segmentación natural del discurso en cola sintáctica. En los versos, el ritmo está previamente fijado, y a él se subordina la forma que, naturalmente, cambia, se deforma"

NOTICIAS

" Solo quince días antes había muerto el escenógrafo florentino Baccio del Bianco mientras trabajaba en el Retiro, a quien sucedieron en el cargo Francisco Rizzi y Antonio María Antonozzi. Pero, en conjunto, 1657 fue un buen año para el teatro cortesano y para quienes estuvieron involucrados en él. Empezó con la fiesta real El Golfo de las Sirenas de Calderón, representada tras un banquete el 17 de enero en el palacio de la Zarzuela ante los Reyes, Felipe IV y Mariana, y sus hijas, Margarita y María Teresa, y terminó con los festejos por el nacicimiento del heredero.

Las fiestas de enero tuvieron como promotor al Marques de Heliche, quien gastó 16.000 ducados en ellas. Tanto el Golfo de las Sirenas como su loa y mogiganga final Juan Rana en la Zarzuela estuvieron a cargo de dos de las compañías a las que se había ordenado no salir de Madrid, las de Pedro de la Rosa y Diego Osorio. Las circunstancias meteorológicasno no favorecieron en aquella ocasión el teatro. Barrionuevo dejó escrito que "fue un día infausto. Llovió a cántaros, que parece se habían desgajado los cielos, como lo han hecho en Madrid diez días arreo", pero no lograron deslucir la fiesta ni a su autor. solo tres días más tarde, el 20 de enero, día de San sebastian, el rey concedió la "grandeza" a Calderón de la Barca y una pensión de 200 doblones. "

AVISO PARA EL LIBRETO

Queridos navegantes.
he bajado una vez más a la Cripta y me he encontrado con este misterio: en la página 68, donde dice

ALFEO,
" ¿Qué tierra es? que como en calzas SUC 93
en ella estoy."


"calzas" no es calzas, sino zarzas.

disculpen y muchas gracias.

sábado, octubre 24, 2009

LA MAGIA DE MI PADRE O EL DÍA DE SAN FRUTOS


Salí de casa muy pinturero camino del Pavón, soñando siempre en mis sirenas, y tanto soñar y soñar, me dejé la cartera en casa. Me di cuenta al llegar a Atocha, cuando quise comprar un paquete de Orbit sabor hierbabuena, y zas, ¿la cartera? Me quedé pobre en un momento. Lo único de valor que llevaba encima era mi propio valor, en ese momento muy mermado, las gafas de Dior que me regaló Rober y el Abono Transportes. En fin, menudo marcador. Un marcador que me decía: ¿dónde tienes la cabeza, hijo. Gracias al Abono llegué al Pavón, le pedí dos euros a Alejandro para el café de rutina y seguí con la rutina del Pavón. Después de la función, busque a mi verdadera Regidora, pues hoy pensé que me quería tener más cerca y el Abono me llevó al culo del pabellón goyesco, y allí fui un marido de Pura Cepa. El tiempo se me voló divagando entre primas con demasiada Coraza, Manuel el azote iraní, la doble de Lucía Quintana que salvó a mi amiga al borde del marlagueño, la tía Maga Turca de Campanilla, y una pareja deliciosa de español y Thay. Allí, centrado sobre todo en el amor de mi amiga, las dos caras de Stanislawky y Tailandia intentando entender asombrada lo que era nuestro teatro clásico, me dieron la doce y pico. Campanilla y yo salimos volando soñando nuevamente sirenas de amor y desamor, hacía el País de Nunca Jamás: quería recoger mis cincuenta libros mágicos. Eso me costo caro, pues entré por la boca del Príncipe de Vergara a la una y diez, después de dejar a Campanilla casi dormida. Y el Abono estaba allí para llevarme, pero sólo hasta el Estadio Olímpico. ¡Que mal!. Además tenía un jaquetón, que surgió allá en la Cepa y que yo ya había intentado calmar con polvos mágicos, pero que en esta situación de estrés hacían su efectum lentamente. Ya no sé en que estación a las Ventas presencié una escena de Rinconete y Cortadillo que se choteaban de dos empleados del Metro, y al pié de una corrida de toros congelada y colgada en la pared, un hombre me ánimo flojamente a continuar mi camino, casi sabiendo que sería difícil que volviera a casa.”Mira a ver, si llegas al transbordo en el Pueblo ese Nuevo. Que mal me olía todo aquello. En ese momento me he venido abajo. No sentía ni el dolor de cabeza. Estuve en un Pueblo Nuevo que me hizo poner la atención el los horarios. Pero no fue el tiempo quien corroboró ni destino esta noche sino la leyenda de la derecha. Allí me explicaba cómo el tramo a la Puerta de Arganda estaba sujeto a otro horario. ¿Eso qué quería decir? Eso quería decir que quizá... y el quizá se convirtió en verdad absoluta y en una pantalla de limón y menta vi escrito que todo terminaba tristemente en el Estadio. El Abono se había quedado muerto, miró para otro lado.
Cuando necesito ayuda mi padre sale de su cueva, impecable y disponible, como Peter Pan. Sale en la noche a mi llamada, para rescatarme del Estadio Olímpico y esperándole al borde del río Arcental me llama un ángel pidiendo ayuda, llega mi padre impoluto y jovial, entra el ángel en el coche Picasso, en ese momento un chica que resulta ser la hermana de Iván Bellido, nos pide ayuda también para llegar hasta Coslada. ¡La Humanidad comienza a brotar, el amor florece entre nosotros, yo estaba besando a la hermana, con muleta incluida, de mi amigo Iván! Y entonces en décimas de segundo un muchacho con los ojos rojos recién salido de los brazos de su chavala nos implora compasión y pide entrar también en nuestro coche pues vive en La Cañada. Y mi padre derrocha gracia y guasa con nosotros y le dice al chaval: - cómo te has bebío to el dinero... Esa es la gran magia de mi padre; hace que los demás salven el pellejo.
Mi padre es muy grande. Qué día tan hermoso, qué viaje tan fascinante de la mano de mi padre. ¿Y la canción? Pues... lo que me dijo el chaval de La Cañada al despedirse al pie de mi Berlingo cerca de las ruinas del Rey Lagarto.
El círculo se cerró llegando casi al portón cuando oí por la radio del coche que en ese momento eran las dos, ya que aunque eran las tres, Miguel había viajado en el tiempo. Los milagros existen. Sólo hay que imaginarlos y luchar por ellos, como mi padre. que es el Gran Soñador. Ahora estoy en mi mar de sirenas, con un libro mágico. Hoy es el día de San Frutos, 25 de octubre de 2009, y sé que allí donde no me lleva el Abono, me lleva mi padre. Y sí, sé que lo he molestado esta noche de otoño, pero he aprendido que se puede salir a la calle sin dinero y con muchas sirenas en la cabeza.

Mañana vienen a comerse conmigo un potaje de Mama.

para Campanilla

viernes, octubre 23, 2009

de parte de Ione para Juanma


Hola tripulación! Me he topado con una imagen que nada más comenzar la obra nos introduce en el mundo de la orilla del mar! ese Basilisco del que habla Alfeo: reptil,monstruo, serpiente de aliento pestilente,será que ha bebido demasiado?, va para ti Juanma!

sábado, octubre 17, 2009


Ya vamos por la octaba.
Primero quiero expresaros mi enorme felicidad y el disfrute que estoy teniendo. Las ocho lecturas, donde apenas hemos templado los instrumentos me has puesto a cien.
Agradecer a los artistas, cómo se toman las lecturas.
Yo creía que sabía mucho de "El Golfo de las Sirenas", y ahora me doy cuenta que al oir los instrumentos, sonando por primera vez, creo que no sabré nada hasta que lo vea representándose.

Por fin me voy saliendo de mis imaginaciones sobre "El Golfo" y me despisto con las de Lidia, Juanma o Álvaro. Eso es muy sano.

Pero todavía, reconozco, que siento un pelín de miedo, si imagino un resultado. Vaya experimento. ¿Dónde nos hemos metido?

Me gustaría que supiérais cuál es la sensación que tengo, con el trabajo que llevamos hecho.

Sobre la tarea del verso, percibo curiosidad, y un montón de dudas, como las de Ulises. Honradez y trabajo, humildad y generosidad. Buen humor. Pureza de los artistas que tengo a mi alrededor. Y creo o quizá sea solo pensamiento mío, que un gran deseo de descubrir algo que no existe...¡porque lo vamos a hacer nosotros!
Ya estoy enamorao de todos.
Los mismos descubrimientos de uno seran para los otros.

Todo lo que no conseguimos hacer ahora, está por descubrir. Es un buen aliciente. No nos vamos a quedar sin saberlo.



martes, septiembre 29, 2009

Hay que cantar las acciones.

Creo que para hacer verso, hay que cantar las acciones. Hablar en verso, es poner nuchas cancioncitas juntas. Como un juego de campanillas en una tabla de madera. Alguien las levanta, y van componiendo una melodía. Y es irresistible no tocarlas.

la bola.

La bola rueda y cada vez se hace más grandecita. Digamos que todavía es del tamaño de un guisante, como el niño Germán hace unos meses. Pero ya ves tú, él ya está boca abajo y a puntito de salir. Lo nuestro también saldrá.



Por lo pronto el jueves haremos nuestra tercera lectura. Las dos primeras fueron, no sé, como el niño de "Encuentros en la Tercera Fase", que vé algo monstruoso y divertido a la vez. Todos se acercaron a ver a un recién nacido. Pero no era un niño normal. Era un niño de agua que flotaba en un pentagrama vacío. Abría la boca para llorar o reirse y no se le oía nada. Su voz no tenía sonido. Cuando lo leímos la segunda vez, entre copas de árboles llenas de polvo del barrio más castizo de Madrí, pudimos darnos cuenta de que en la casa de Comadre Rosario el niño bailaba. Bailaba y bailaba mientras chillaba sin chillar. Y al llegar la pausa, después de echar el cigarrito, levantamos el niño en las piernas y al paso, al trote, al galope, al galope, al galope, el niño empezó a decir, pero esta vez sonando flojito: un, dos , tres, cuatro, cinco, seis, siete, y ocho.
Y empezó a bailar. Estamos acojonaos.

He oído rumores de que el próximo jueves, la peña va ir armadita hasta los dientes, para ver al niño ese. Jeje, el jueves llega Alfeo.

Se va a cagar hasta la perra.

que no te pares en ver, sin que pases a mirar




Hemos llegado a tierra firme. Ahora toca aprovechar el tiempo. Descifrar el misterio, viendo y oyendo. Mientras llegábamos hasta aquí, que fue sin más, saltar del barco y salir corriendo, lancé alguna botella con mensajes, y algunos ya van contestando.

Nuestro más sincero agradecimiento al Teatro de la Abadía.

domingo, septiembre 27, 2009

viernes, septiembre 25, 2009

Bueno, mañana sábado, haremos nuestra preciosa segunda lectura. ¿Quién lo diría?. De momento los pasos son pequeños pero son. Quiero agradecer muchísimo a las personas que nos han facilitado estos espacios para leer y reunirnos, por darnos la posibilidad de comenzar con buen pie, en sus lugares de trabajo, que son preciosos y nos merecen un enorme respeto. Gracias compañeros por vuestro apoyo.

Mañana faltará la buena Escila y el terrible Alfeo, pero hay trabajo de sobra para hincar el diente al texto y ponerlo en boca, como diría mi primo. Ole.

Hasta mañana. Y gracias a Miguel, Alicia, Luis, Rosario, Susana, Mila. Y los que vengan...

Miguel

martes, septiembre 15, 2009


Bueno, hoy es un día estupendo. Ya ha aparecido Alfeo, también el bueno de Ulises, y así cerramos el círculo de nuestro reparto. Por fin.
La lectura será este sábado, también por fin. Y si todo sale como debería será en un lugar muy especial para todos...ya sabéis.
Ahora me voy a fotocopiar los libretos para todos los lectores del día 19.




"Cada movimiento que hago es una pequeña obra de arte"

Michael Checkov.

lunes, septiembre 14, 2009

septiembre tranquilo.


Aún no tenemos sitio para hacer la lectura. Estoy buscando al bueno de Alfeo. Pero no da señales de vida. Me he encontrado a Dante niño y no sabe nada.
También me vinieron a saludar, pero en forma de dibujos fantasmagóricos, otros personajes, y algunas escenas se vuelve obsesión...
Por ahí dejaré algún dibujo.

jueves, agosto 27, 2009

Un cementerio(con los muertos de la diosa), una torre, una cabaña, una playa, una selva.

martes, agosto 25, 2009

Aires del sur, la pequeña Celfa se abre camino entre la arena violenta de la playa. Trae algún pescado. Y ya empieza a protestar en italiano. Un beso Elenna. Gracias por unirte al proyecto.

lunes, agosto 24, 2009

Hoy nos ha visitado la bella Escila. La diosa cazadora, que lleva cuatro perros rabiosos a sus pies, que devoran a los hombres que se cruzan en sus vidas...

viernes, agosto 21, 2009

la botella con mi mensaje ha sido recogido por algunas personas...y para este septiembre iniciaremos la primera lectura de la pieza piscatoria.Se preña en verano, la música quizá, algunos del reparto, un sitio donde reunirnos y un buen puñado de compañeros que de momento me están dando coba.Gracias.

Os recomiendo el libro de David Lynch sobre el pez dorado...


Hay un músico tremendo, que ya está dando muestras de vida. Anda enredado con el libreto y promete decir algo pronto.